PARVA. Menuda y joven esclava de Tarraco, obligada a ejercer de prostituta para el beneficio de sus nuevos amos. Una vida de sufrimiento y dolor, que Intenta no mostrar en la taberna donde está encerrada. Aunque desinhibida a la fuerza por su trabajo, es noble y sensible. No tiene ninguna esperanza de que su desgraciad vida pueda cambiar: Prestar su cuerpo a sus clientes, a Polibius y sufrir los maltratos de Bruna, su dueña.

EVADNE. Es la amiga imaginaria de Parva, a la que hace confidente de sus desgracias. Al verse ante una nueva esperanza, hace suyo ese nombre para desligarse de su anterior existencia. Evadne es el nombre de una ninfa del agua, pues Parva habla con su reflejo en el abrevadero de su casa. 


POLIBIUS.  Gordo mesonero que rige, junto a su esposa Bruna, la taberna donde obligan a su joven esclava Parva a confraternizar con los clientes, lo que les produce un gran beneficio. Siente atracción por Parva y se aprovecha a menudo de su situación de poder sobre la muchacha, aunque sobre todo la considera una inversión muy rentable y la vigila celosamente.

PORCUS es el apodo por el que todos conocen a Polibius, debido a su semejanza física con ese animal de granja, aunque también por su gordura, sus gruñidos y por su falta de higiene y cuidado personal. Considera a la pequeña Parva como el pilar de su negocio. Su belleza hace que su taberna se llene y no está dispuesto a desprenderse de ella por mucho dinero que le ofrezcan.


Esposa de Polibius. Una malévola, avara y amargada mujer, dueña de Parva., a la que desprecia y detesta por la influencia que su juventud y belleza ejerce en Polibius y porque éste la asedia constantemente. Solo su avaricia es mayor a su crueldad y disfruta haciéndole al vida imposible y martirizando a diario a la pequeña esclava.


GULPIA.  Anciana esclava y compañera de Parva en la taberna, en la que se ocupa de confeccionar los guisos que se sirven en el establecimiento de comidas. Desprecia profundamente a la muchacha por envidiar a su belleza, juventud y por pensar que obtiene privilegios de Polibius por ello. 


Joven heredero de la familia Galeria. Está sumido en una depresión por la muere de su verdadero padre, al que quería desde pequeños, pensando que solo era su mentor y amigo. Conoció a Licia, su prometida en extrañas circunstancias y esperaba haberse casado con ella, de no ser por la desgraciada pérdida de Lázaro. Sabe que Fidelia y Adelia lo adoptaron, no conoce a ninguna otra familia y los ama. Aunque no le apetece separarse de los que ama, ahora ha de asumir su responsabilidad de sustituir a su padre en una misión de la que no sabe demasiado, pero resignado acudirá a Tarraco a cumplirla, escoltado por Tercio. 


Padre adoptivo de Marcio y patriarca de la familia Galeria. Ésta era un nódulo de creyentes cristianos de Hispania. En su juventud fue acólito de una singular religión originaria de Judea. Tras profundizar en estas creencias, escuchó los hechos y las palabras de un rabino que afirmaba ser el Hijo de Dios y se interesó por sus enseñanzas. Pronto descubrió que esa filosofía sería el pilar de su vida y desde entonces ha buscado todos los escritos que hablaban sobre Él y de lo que predicaba. Desde entonces ha buscado y copiado todos los textos que han caído en sus manos, ha contactado con los grupos de creyentes que ha encontrado y los ha ayudado. El otro pilar de su existencia es Adelia, a la que ama de una forma desaconsejada por la sociedad romana. Ha criado y aprecia a Marcio como si fuera su propio hijo y le ha hecho su heredero.


Prometida de Marcio, vive en la domus Galeria tras ser rescatada por el joven de una muerte segura, al quedar encerrada en una cisterna durante el asalto mortal a la finca de su familia. Tras enamorarse, se fugaron en secreto por temor que su tutor legal le hiciera efectivo un compromiso matrimonial con un desconocido y corrieron terribles aventuras, descubriendo a la banda de forajidos que mató a su familia.


Esposa de Fidelio. Gracias a la bondad y tesón de su esposo, conoció sus creencias y las hizo suyas, como el resto de su casa. También descubrió una relación con su esposo muy poco común el mundo romano. Tiene tres hijos: un varón y dos hembras, aunque Marcio no es su hijo natural, lo quiere tanto como a Martina y Maria. Marcio tenía solo días, cuando Julia, su amiga lo dejó a su cargo huyendo de su marido, que quería abandonar al pequeño por pensar que no era suyo.


Hombretón respetado por todos y temido por los traviesos chiquillos de la domus Galeria. Es el capataz de la hacienda y hombre de confianza de Fidelio. Un liberto fuerte, despierto y fiel, elegido por Fidelio para ser el perfecto compañero de viaje para cuidar de su hijo en una misión no exenta de peligros. Tras unos días en su compañía, Marcio descubrirá que no lo conocía en absoluto.


Un humilde pescador de Tarraco. Decano y líder de la comunidad cristiana de la ciudad. Hasta ahora, los cristianos se reunían en la sinagoga, pero se ha producido un cisma, motivado por la intransigencia de la rama farisaica de los congregados. Algunos, incluido él, deben ahora ocultarse para salvaguardar su integridad de los que los persiguen para castigarlos ejemplarmente.


Parlanchín tonsor que parece conocer todo lo que ocurre en Tarraco. El peluquero, barbero y dentista siente una especial debilidad por las carreras de carros.


Rudo y violento suboficial que comanda las tropas auxiliares, las encargadas del orden y los incendios de Tarraco. Tiene una rara obsesión con la pequeña Parva, a la que visita asiduamente en la taberna de Porcus. Ella siempre lo ha considerado uno de sus clientes más atípicos y extraños.


Viejo pescador, acólito de la sinagoga de Tarraco, donde conoció a Póstumo y al resto de cristianos. Ahora, alineado con los que los persiguen, busca reforzar su posición en la comunidad por su ayuda a los enviados del Sanedrín.


Rabino fariseo enviado por el Sanedrín de Jerusalén con poderes para para poner orden en la sinagoga local tarraconense y para apresar y castigar duramente a los disidentes, seguidores de Cristo.


Nauclerus y dueño de una pequeña flotilla de naves de transporte con sede en Tarraco. Tras salvarlo de sus perseguidores, se siente obligado a ayudar a Marcio, por una antigua deuda con su padrastro, al que conoce desde años.


Rudo, fornido y parco marinero del Zefirus. Es el esclavo de confianza de Marcellus y su guardaespaldas. La mejor escolta posible para recorrer una Tarraco llena de peligros y proteger a una pareja de jóvenes que intenta zafarse de él.


Esposa de Marcellus. Sufre de angustia y soledad a causa de las largas ausencias de su esposo e hijo. Aunque extremadamente charlatana y curiosa, es noble y tiene un gran corazón.


Antiguo conocido de la familia Galeria e integrante de la pequeña comunidad cristiana de Tarraco.


Miembro de la partida local que ayuda a los enviados del Sanedrín en su búsqueda de los tránsfugas de la sinagoga, aunque en realidad actúa de topo para sus hermanos cristianos.